Singapur, oficialmente República de Singapur, es un país soberano insular de Asia, formado por sesenta y tres islas, cuya forma de gobierno es la república parlamentaria.
Su territorio se divide en cinco consejos de desarrollo comunitario. Su capital es la ciudad de Singapur, por lo que Singapur se considera una ciudad-estado. Está situado al sur del Estado de Johor en la península de Malasia y al norte de las islas Riau de Indonesia, separada de estas por el estrecho de Singapur. Con 697 km², es el país más pequeño del Sudeste Asiático. Su territorio ha crecido constantemente con tierras ganadas al mar.
Desde el siglo ii d. C., cuando se establecieron allí los primeros humanos, la isla de Singapur ha formado parte de varios imperios regionales. El moderno Singapur fue fundado en 1819 por el británico Thomas Stamford Raffles como puesto comercial de la Compañía Británica de las Indias Orientales con el permiso del Sultanato de Johor. El Reino Unido obtuvo la soberanía sobre la isla en 1824 y esta pasó a ser una de las Colonias del Estrecho británicas en 1826. Ocupada por los japoneses durante la Segunda Guerra Mundial, Singapur declaró su independencia del Reino Unido en 1963 como un estado más de Malasia mediante un referéndum de incorporación, de la que se separó dos años después. Desde entonces la ciudad-estado ha prosperado rápidamente y se ha ganado la distinción de ser uno de los «cuatro tigres asiáticos».
Singapur es una de las principales ciudades globales y uno de los centros neurálgicos del comercio mundial, contando con el tercer mayor centro financiero y el segundo puerto que más mercancías mueve. Su economía globalizada y diversificada depende especialmente del comercio y del sector manufacturero. En términos de paridad de poder adquisitivo, Singapur es el tercer país con mayor renta per cápita del mundo, además de figurar entre los primeros países en las listas internacionales de educación, sanidad, transparencia política y competitividad económica.
Políticamente, Singapur es una república parlamentaria multipartidista con un gobierno parlamentario unicameral inspirado en el sistema Westminster británico. El Partido de Acción Popular ha ganado todas las elecciones desde que el país obtuvo la independencia. Sin embargo, las libertades civiles y de expresión están sumamente restringidas y se dan casos de censura por parte del Gobierno, por lo que está considerado como un país con rasgos tanto democráticos como autoritarios. La población, unos cinco millones de habitantes, es muy diversa: alrededor de dos millones son de origen extranjero y entre los nativos, el 75 % son chinos y el resto minorías de malayos, indios o euroasiáticos. Esta diversidad tiene su reflejo en los cuatro idiomas oficiales del país, que son el inglés, el chino, el malayo y el tamil, así como en las políticas gubernamentales que promueven el multiculturalismo.
Singapur es uno de los miembros fundadores de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático y ha sido sede del secretariado del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico, además de formar parte de la Cumbre de Asia Oriental, del Movimiento de Países No Alineados y de la Mancomunidad de Naciones. El rápido desarrollo del país lo ha llevado a tener una influencia importante en los asuntos internacionales y a que algunos analistas lo consideren una potencia intermedia.